J.

Esta es la historia de Dieguito, un niño que nadie nunca lo acompañaba en nada, jugaba solito y siempre buscaba algo con qué entretenerse para poder pasar un momento divertido. En las noches miraba las estrellas y pedía tener un amigo para poder conversar, jugar, reír y pasarlo bien, todos los días pedía y pedía pero nadie nunca llegaba. Un día, una tía llamada Javiera le regaló en su cumpleaños un cubito de muchos colores y cosas interesantes. A Dieguito le encantó su regalo porque nunca nadie le había regalado algo así. Él lo acariciaba, lo apretaba, lo lanzaba y se transportaba a un mundo completamente imaginario donde no existía la maldad y la felicidad era el centro de todo.

Una mañana, Dieguito se levanta y se da cuenta que el cubito no estaba donde lo dejaba todas las noches, lo empezó a buscar por todas partes, pero no lo encontraba, de repente siente una voz que venía debajo de la cama, se asoma y ve el cubito. Dieguito muy sorprendido se acerca con un poco de temor y le pregunta cómo se llama y de dónde viene, el cubito con una voz muy temblorosa le dice que se llama Cubix y que es enviado del país de las fantasías para hacer feliz a todo niño que lo necesite y que lo merezca. Dieguito lo toma, lo abraza mira las estrellas y les da las gracias por haberles mandado tan lindo regalo.

Nif!